Los cuarzos, tienen
propiedades curativas. El cuarzo ha sido empleado en distintos tiempos y en
distintas culturas. Ahora la ciencia está redescubriendo su gran poder y su
amplia aplicación. Los cristales de cuarzo poseen su propio campo de energía,
ellos focalizan, amplían y dirigen la energía en torno o hacia las personas.
Actúan equilibrando el campo magnético en nosotros. Es de destacar que tu nivel
energético aumenta hasta 10 mil veces cuando tomas un cuarzo en tu mano o lo
llevas encima. Sirven para curar, meditar, solicitar su ayuda para una
situación específica, o simplemente como protección contra cualquier mala
vibra.
Cuando vayas a escoger tu
cuarzo, has caso de tu intuición, toma el cristal con tu mano izquierda y
siente sus vibraciones, escoge el que te atraiga más. Si bien todos los
cristales son distintos todos son igualmente beneficiosos.
Dado que los cuarzos son
cristales muy sensibles debes limpiarlos
antes de usarlos.
Para ello sigue los
siguientes pasos:
– Lava con agua y jabón tu cuarzo para
remover toda impureza.
– Coloca el cristal toda la noche en
un vaso con agua y deja que le de toda la noche la Luna llena y al otro día que
le dé el Sol.
– Toma el cuarzo con la mano derecha y
pásalo por el humo de un incienso, después acércalo a la flama de la vela. Con
este procedimiento, el cristal ya está limpio.
Usa tu cuarzo engarzado en
plata u oro con una cadena o cordón lo suficientemente largo para que esté
ubicado a la altura del corazón y al contacto con la piel.
Las distintas variantes
del cuarzo tienen propiedades específicas para la salud del cuerpo y del
espíritu. Citamos a continuación las principales propiedades de los distintos
cuarzos más conocidos:
Ágata: Tonifica y
fortalece el cuerpo y la mente. Da fortaleza y valor. Facilita el
discernimiento de la verdad y la aceptación. Propicia la espiritualidad y la
alta conciencia.
Amatista: Calma los
miedos, aumenta los niveles de esperanza, levanta el espíritu y estimula
pensamientos espirituales. Ayuda a superar adicciones de todo tipo. Ayuda a la
memoria, protege del mal, da valor, éxito en los negocios, retarda la vejez.
Cuarzo Cristal: Elimina la
migraña, tiene poderes sobre la mente y ayuda a tener seguridad en sí mismo.
Cuarzo Rosa: Nos hace más
receptivos a la armonía y la naturaleza. Calma nuestras emociones y nos ayuda a
encontrar la paz y la armonía. También ayuda a encontrar al amor y a
consérvalo. Es el cuarzo de más alta vibración.
Cuarzo Rutilado: Fortifica
el sistema inmunológico. Evita la depresión y retarda el envejecimiento. Además
activa las facultades cerebrales y el sistema circulatorio. Atrae la riqueza.
Cuarzo Ahumado: Este
cuarzo colabora en sentirnos más libres y felices. Elimina energías negativas y
las trasmuta en energía positiva. Ayuda a encontrar objetos perdidos, saber la
verdad en cuestiones ocultas o descubrir mentiras, revela a los enemigos y a
las personas que pueden envidiarte.
Cuarzo Blanco: Otorga
buena fortuna. Elimina dolores de cabeza y protege a toda hora. Es un cuarzo
universal y potente. Sirve como objeto adivinatorio porque te revelará en sus
formas internas y luces, lo que desees saber.
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