La magia roja o hematomancia
es un tipo de magia y adivinación cuyo componente central es el uso de la
sangre u otros tejidos vivos. También puede realizarse a través del sexo. En
las sociedades occidentales contemporáneas, se considera un tipo de magia
negra, principalmente si se utilizan tejidos vivos o sangre de terceros, no
tanto así con los propios (con tejidos propios se consideraría como magia
blanca). En algunos casos está orientada al amor y la sexualidad, pero por lo
general se emplea con el objetivo de lograr la destrucción y/o la manipulación
de la vida de quien no sabe lo que le hacen.
¿Para qué se utiliza la
magia roja?
La magia roja se relaciona
con muchas cosas, en primera instancia se la considera como la magia sexual,
que se practica durante los actos sexuales para poseer diferentes efectos,
principalmente para obtener un mayor deseo sexual y lograr satisfacer todas las
necesidades de la persona con la que se esté en pareja.
Las prácticas de magia
roja también se encuentran fuertemente ligadas con los pactos satánicos, en
donde una persona ofrece su alma a cambio de algún interés que puede ser
material o emocional; y como hechizo de amor, la magia roja ayuda a retener a
la persona querida en contra de voluntad. Teniendo todo esto en cuenta podemos
llegar a la conclusión de que, evidentemente, la magia roja es una rama más de
las prácticas ocultistas de magia negra, y por ende, es condenada por la mayor
parte de la sociedad mundial. Se podría definir a la magia roja como una
especie de magia para la adivinación, la cual se compone principalmente por la
utilización de sangre durante sus rituales.
El uso de la sangre en los
hechizos tiene como finalidad el cumplimiento de las peticiones de la persona
que la está practicando, y habitualmente estas prácticas se llevan a cabo los
días viernes ya que se cree que el hechizo tiene un efecto inmediato debido al
a que los viernes suelen ser los días de mayor flujo de energía correspondiente
a la magia negra, por ello el resultado es inmediato. Se cree que la magia roja
también se relaciona con el canibalismo en una época en la que se creía que
comiéndose ciertas partes del cuerpo del enemigo, o bien, comiéndoselo todo, se
adquirirían las mismas habilidades físicas y mentales.
La magia roja utiliza como
medio a la sangre ya que ésta impone mucho respeto además de evocar miedos,
deseos oscuros y pasiones. Este tipo de prácticas ocultistas pertenecen a una
corriente de pensamiento mágico lineal, en donde la sangre y la carne, ya sea
humana o animal, poseen la capacidad de transmitir todas sus características
importantes de sus respectivos propietarios. Por otra parte, la magia roja ha
considerado en alguna época que tanto la carne como la sangre muchas veces no
llegan a alcanzar la fuerza que se necesita para poder desempeñar la función
deseada, a menos que éstas se activen por medio de alguna práctica dolorosa,
del miedo o de la excitación sexual en aquellos momentos en los cuales se está
llevando a cabo la práctica de la magia roja. Ahora bien, es muy difícil
encontrar algún grupo que lleve a cabo públicamente diferentes actos de magia roja
ya que la misma está prohibida por la ley en la mayoría de los países del
mundo, además, debemos tener en cuenta que la mayoría de los rituales que se le
dedican a la magia roja suelen tener un estilo muy tribal difícil de ver en las
ciudades.
El sacrificio de animales
en la magia roja
El sacrificio de animales
data de tiempos tan antiguos que incluso figura en el antiguo testamento de la
Biblia, por lo que no se limita únicamente a la práctica de magia roja o
cualquier otro tipo de magia negra. Se dice que en ese tiempo Dios requería de
esto para que el hombre pudiera ser absuelto de sus pecados, pero teóricamente
la matanza de animales se terminó con el último sacrificio que fue el de Jesús.
Decimos “teóricamente” ya que decenas de religiones que practican magia roja en
el mundo siguen ofreciendo sacrificios animales a sus dioses muchas veces con
la finalidad de obtener algún beneficio a cambio, o simplemente por rendirle
culto.
Las tribus africanas
fieles a la religión vudú es la más conocida por estas prácticas, al igual que
la umbanda (aunque no se reconozca públicamente, se sabe que practican magia
negra y roja), y a pesar de todos los esfuerzos de la ley y de las
organizaciones protectoras, es muy difícil abolir esta práctica. Generalmente,
dependiendo de las creencias y de la religión, los animales que se sacrifican
son los gallos, gallinas, perros gatos (negros), cabras, ovejas y corderos, y a
pesar de que en muchos rituales se los tortura para dejarlos morir lentamente
(se cree que le da una mayor satisfacción a los dioses) hay ritos de magia roja
en los que simplemente se los degüella y desangra sobre algún altar.
Por otro lado, son muchas
las religiones y tribus que practican magia roja que aseguran que los dioses no
pueden vivir sin sus respectivas ofrendas de sangre, ya que la misma los ayuda
a aumentar su energía y paralelamente sus poderes inmortales, sin mencionar que
el cuento popular es que la sangre del animal beneficia a las personas
(especialmente a quien lleva a cabo la matanza) infundiéndole nuevos y más
altos niveles de vitalidad además de su energía y sus defensas naturales.
Ofrecer sangre animal a cualquier deidad encargada de custodiar los actos de
magia roja, es otorgarle un regalo puro de energía que puede llegar a ser
utilizada para la creación de algún nuevo ser, por ello es que los animales que
se sacrifican en estos tipos de ritos tienden a ser muy diferentes ya que cada
uno posee una energía, vitalidad y fortaleza diferente.
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