Son muy conocidas las
cuatro fases de la luna; la luna nueva, la luna llena, cuarto creciente y
cuarto menguante, siendo las más populares la luna nueva y la luna llena.
Aunque también se pueden distinguir cuatro fases más, por lo que podemos decir
que el ciclo lunar está dividido en ocho fases en total, cada fase con un gran
significado. El número 8 representa un gran poder de transformación y siguiendo
minuciosamente estas ocho fases descubriremos sus efectos. Las fases menos
conocidas son: la Creciente, distinta del cuarto creciente, es útil para los
cambios, para mejorar o superar todo aquello que está en decadencia y para
ponernos en acción; la Gibosa, nos sirve para reflexionar y así lograr que
nuestras vidas tengan más valor y para desarrollar a pleno nuestras capacidades
personales; la Diseminadora, ideal para compartir ideas, inquietudes, o
distintos intereses así como también aumentar la comunicación con los otros; la
Balsámica, es propicia para realizar nuevos planes y para hacer una revisión de
los errores y las metas que no hemos llegado a concretar, purificando los
deseos e intensificando los proyectos.
Mostrando las entradas con la etiqueta influencia de la luna. Mostrar todas las entradas
Mostrando las entradas con la etiqueta influencia de la luna. Mostrar todas las entradas
jueves, 22 de marzo de 2018
Suscribirse a:
Entradas
(
Atom
)