El deseo profundo que en
esencia compartimos todos los mortales por comprender cada día un poquito más
sobre lo que va a venir; por poder tener aunque más no sea, alguna que otra
orientación o certeza en relación al futuro próximo; nos transforma en inagotables
creativos e incansables buscadores de técnicas que colaboren en disminuir la
ansiedad propia que sentimos cada vez que la seguridad o comodidad amenazan con
abandonarnos.
Y en ese intento de
conocernos, de allanarnos el camino y apostar a un futuro mejor, vamos
descubriendo a diario distintos discernimientos capaces de sorprendernos,
transmitirnos algún aprendizaje sobre la vida y movilizarnos internamente,
empujándonos al cambio que cada etapa nos va proponiendo, en cada área y como
pauta de evolución.
Todos los oráculos son
creaciones humanas que basadas en el inquietante poder de nuestro inconsciente
para recibir, captar y decodificar la información vertida por ellos, nos
trascienden la objetividad consciente con respuestas capaces de guiar nuestro diario
acontecer, desde una sabiduría ancestral que nos comunica a todos los que
habitamos esta tierra.
Las tizas con su origen
mineral y siendo producto de la naturaleza, se han convertido en éstos últimos
tiempos en verdaderas aliadas para tal fin; cada vez son más los videntes que
las utilizan para sus presagios sobre el futuro cercano. Este oráculo, capaz de
desentrañar todos los aspectos de nuestro ámbito cercano; es especialmente útil
para la faz económica y financiera.