A continuación deseo recordarles que existen al menos ocho regalos que no cuestan un centavo, que
son muy valorados y esperados por quiénes los reciben y que tener la grandeza
de corazón y la generosidad necesaria para poder obsequiarlos, nos convierte en
mejores personas y nos aleja de la negatividad del egoísmo.
1.- El regalo de Escuchar.
Pero realmente escuchar,
sin interrumpir, bostezar, o criticar. Solo escuchar.
2.- El regalo del Cariño.
Ser generoso con besos,
abrazos, palmadas en la espalda y apretones de manos, estas pequeñas acciones
demuestran el cariño por tu familia y amigos.
3.- El regalo de la
sonrisa.
Llena tu vida de imágenes
con sonrisas, dibujos, caricaturas y tu regalo dirá: “me gusta reír contigo”
4.- El regalo de las notas
escritas.
Esto puede ser un simple
“gracias por ayudarme”, un detalle como estos puede ser recordado de por vida.