El aceite esencial de Lavanda
es uno de los aceites más utilizados debido a su enorme versatilidad. Los
antiguos romanos lo utilizaban para sus baños higiénicos, además, lo más
importante es que el aceite esencial de lavanda posee grandes poderes curativos
y con él se pueden limpiar espacios de la casa, ya que mezclado con agua,
elimina las energías negativas.
A nivel físico, el aceite
esencial de lavanda se puede aplicar en forma pura sobre quemaduras y heridas
leves, ya que entre sus numerosas propiedades, una de las más importantes es
que actúa como un efectivo cicatrizante con tan sólo aplicar una gotita sobre
la zona afectada.
También es un efectivo y
rápido analgésico general, se puede usar para aliviar los dolores de los
músculos, los dolores de espalda y los dolores de la columna, sin olvidar que
también sirve para aliviar dolores de cabeza, lo recomendable es colocar una
gota de aceite de lavanda en la palma de la mano y pasar por la nuca, luego
colocar un instante los dedos sobre las sienes girándolos suavemente, al cabo de
unos minutos, el dolor de cabeza irá cediendo y nos sentiremos mucho mejor, el
molesto dolor habrá pasado.