Para interpretar los
sueños es necesario tomar en cuenta distintos factores. En cada caso, es
primordial estudiar el lugar donde vive el soñante, su personalidad, su estado
de ánimo, sus costumbres. Es así como una cabeza rapada puede considerarse como
un mal signo, pero si es un sacerdote quien la lleva, no es considerado así,
tampoco se considera mal si en el lugar en que se vive es costumbre llevar la
cabeza rapada.
A veces, hay símbolos en los sueños que involucran a parientes
del soñante. Es así que se considerara un peligro en el que esta involucrado el
padre del soñante, si en los sueños de éste, aparecen enfermedades o
padecimientos o una herida en la cabeza. También, cuando en el sueño aparece
una herida en el pie derecho, se interpreta como una amenaza hacia la hermana o
el hermano, si esa herida es en el pie izquierdo, esa amenaza esta dirigida
hacia una de las personas cercanas de la casa.
La mano izquierda simboliza a
los hijos del soñante y la mano derecha simboliza a madre. La presencia de amigos
o enemigos en los sueños nos ofrecen también símbolos para ser interpretados.
La aparición de ancianos y jóvenes dan como resultado un buen augurio, las
dificultades vienen de los sueños con niños muy chicos, y su significado varía
si estos son bebés sonrientes y felices, o si están llorando.
La muerte suele estar
anunciada por la presencia de un hombre vestido de negro y es de buen presagio,
si ese hombre está vestido con ropa blanca. Cuando se sueña con una persona
muerta se esta representando la tranquilidad, mientras que es un mal augurio
cuando se sueña con un enfermo. Las mismas interpretaciones sirven para una
soñante mujer. Los sueños fueron clasificados en la antigüedad en siete tipos,
que aún en la actualidad se mantienen.