Tenemos que considerar que
a cada aspecto planetario se los puede interpretar como buenos, malos, fáciles
o difíciles.
Algunos aspectos producen tensión mientras que otros otorgan
fluidez y armonía.
Hay que tener en cuenta que cuando Júpiter tiene aspectos
fáciles, predispone a sus nativos al derroche, a la pereza o exagerada
confianza en el azar, estas características pueden disminuir si en su carta
aparecen sus aspectos difíciles.
Júpiter tiene como característica esencial
expandir todo, puede mostrar claramente las energías elevadas al máximo como,
también, desarrollar y mejorar las cosas al extremo. Esta característica de
expansión y de optimismo de Júpiter hace que sus nativos, según sea el signo o
casa, quieran abarcar demasiadas cosas. Por otra parte, Júpiter, puede otorgar
habilidad y nobleza por la generosidad, la actitud positiva y el planteamiento
filosófico que posee este planeta.
Es importante saber que cada planeta que se
encuentre en aspecto estrecho con Júpiter se impregna de las ganas de buscar
nuevas experiencias y expande toda forma de expresión, otorgando a su vez la
posibilidad de correr determinados riesgos. En cada acción influenciada por
este planeta se necesita abrir puertas, con cautela y valor. Nos ofrece,
también, oportunidades y un amplio entendimiento.
Para poder aprovechar todas
las oportunidades que ofrece Júpiter, en cualquier aspecto, es necesario
esforzarnos. Cuando en el mismo signo de Júpiter se encuentran otros planetas
en aspecto armonioso, podemos aprovechar con mayor facilidad esas energías,
para nuestro beneficio, pero, cuando tiene aspectos desafiantes nos provocará
mayor esfuerzo.
Júpiter esta poco influenciado por los demás planetas, siempre
amplifica todo lo que está a su alcance, es como si se hiciera valer y
defendiera lo suyo, esto es debido a que es el planeta de mayor tamaño,
recordemos, también, que es considerado como un dios por ciertas mitologías.
Saturno es el único planeta que parece refrenarlo, pero aun así, Júpiter se
encarga de expandir las ambiciones y los anhelos del propio Saturno. Se puede
decir que Júpiter se aferra y amplifica las energías del planeta con que se
aspecta.