El Colibrí simboliza al
Amor Genuino, aquel que disfruta del acto de vivir, sin posponerse jamás a sí
mismo, que busca el rico néctar de la vida, que muestra su belleza, su
colorido, su habilidad para saber moverse bien en la vida, con ductilidad y en
todas las direcciones. El Colibrí también sabe bien cómo defenderse, poner
límites sanos para su vida, y no por pequeño es indefenso.
El vuelo ‘increíble’ del
Colibrí , es increíble porque se desplaza en todas las direcciones, y esto a
nivel de su mensaje nos muestra cómo hemos de movernos en la Vida, para ser en
verdad seres humanos naturales, poderosos, resilientes, sintientes, maternos,
amables, interdependientes e interconectados con toda la existencia.
El Colibrí también nos
aporta Dinamismo, Visión Profunda, Compasión y Equilibrio, es un gran
“polinizador de conciencia”.
El Colibrí nos trae un
mensaje especial. El poder del colibrí nos da la capacidad necesaria para
enfrentar retos que parecen inalcanzables, dándonos la fortaleza para
superarlos.
Nos da el dominio de la
calma interna aunque por fuera todo esté agitado. También nos enseña a tomar el
néctar dulce de la vida, así como él lo toma de las flores. Cuando aprendemos
esto, disfrutamos las lecciones de la vida con alegría en el corazón y sabemos
transmitirlas a todos los que nos rodean.